Abdelaziz Barrada (Provins, Francia, 19 de junio de 1989), es una de las revelaciones del Getafe en este inicio de temporada. Parece que va a ser la primera realidad del filial del equipo madrileño, que suma ocho temporadas consecutivas en Primera División. En once partidos, ya ha mostrado muy buenos detalles. Ayer, ante el Atlético, se destapó con un golazo de falta y una actuación estelar.
Formado en la cantera del París Saint Germain, donde estuvo tres campañas entre 2006 y 2009, el centrocampista franco-marroquí llegó al club presidido por Ángel Torres el curso pasado, donde completó un buena temporada el en Getafe B a las órdenes de Emilio Ferreras.
Desde entonces, alternó entrenamientos con el primer equipo, cuando Míchel era el entrenador, con encuentros en Segunda B, donde jugó 34 partidos y marcó cuatro goles. Antes de aparecer en las televisiones con su gol al Atlético, hizo la pretemporada con el Getafe de Luis García. Y, de momento, ahí se ha quedado, ha participado en diez de los once partidos de Liga. Solo se perdió uno por lesión.
"Hemos apostado por él. Le vi en pretemporada y vi cosas que son diferentes. Ha ido de menos a más. Recuerdo el partido del Levante, cuando debutó y los nervios le pudieron. Pero era lógico. Es muy tímido, es muy suyo. El idioma le cuesta un poquito a veces, pero estoy muy contento por él. Es un chaval que va creciendo", aseguró Luis García después de vencer al Atlético de Madrid.
Toni Muñoz, director deportivo del club, también es optimista con la perla de la cantera "azulona". Y de sus palabras se atisba prudencia: "Todavía está en su fase de crecimiento y creo que tiene que adaptarse un poco a la Liga. Es un jugador que tiene muy buenas aptitudes que puede explotar. Es un chico que, asemejarse a alguien, es complicado todavía. Técnicamente se ve que tiene cosas muy interesantes. Cuidado, que puede ser un jugador muy bueno".
En estos momentos, Abdel vive con unos amigos y su principal apoyo en el vestuario es el centrocampista argelino Mehdi Lacen. Hablan el mismo idioma, francés, y ha ayudado mucho al joven de 22 años.
También es mimado por la entidad madrileña. No quieren ningún despiste y están cuidando todo hasta el más mínimo detalle. "Él tiene que seguir con humildad y trabajo. Sabe que si no juega con el primer equipo lo hará con el filial. Está en su fase de progreso y es tímido y está demostrando tener humildad y discreción", comentó Toni.
Tímido ante los medios
Esas declaraciones concuerdan con la primera aparición de Abdel en una sala de prensa. Tuvo que hacerlo después del partido ante el Atlético. Callado, escondido detrás del micrófono, apenas visible y con una voz poco audible, hizo las únicas declaraciones que se le conocen en España tras sumar 627 minutos en Primera División.
"Me siento muy bien, estoy trabajando para ayudar al equipo y hoy estaba emocionado de ganar. He trabajado con todos, los primeros días era difícil, pero necesitamos muchos días para seguir trabajando. El gol se lo dedico al mister, que me dijo que iba a meter uno para tener un poco más de confianza para hacer lo que he hecho", señaló.
El futuro de Abdel parece bueno. Otros del filial lo intentaron en el Getafe. José Antonio marcó el primer gol oficial en Primera del equipo, pero desapareció. Nombres como Adrián Sardinero o Alberto Escassi han estado a punto de cuajar, pero ahora están cedidos. Por ahora, Abdel Barrada es el mejor embajador de los filiales del club madrileño y parece que ha venido para quedarse. Es la joya de la cantera del Getafe.
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